Rayamos como el Sol de la mañana al
llevar la luz de la felicidad a todos los que se abren para ser felices.
Nuestra vibración es la de la alegría y nos gustaría que todos ustedes pudiesen
sentirse así.
Los beneficios de sentirse feliz son
mayores de lo que ustedes pueden imaginar en su conciencia momentáneamente
humana. Si no tuviesen tantas disculpas para impedirles en vuestro camino,
sabrían visceralmente lo que estamos comunicándoles ahora.
Estamos, si es que podemos así decirlo,
en un nivel de vibración puro que para ustedes de la Tierra sonaría como la
palabra entusiasmo o alegría.
Somos el nivel más intenso y traslúcido del éxtasis. Somos la emoción más
completa e intensa del bienestar y vibramos en una frecuencia alta y abarcante como la felicidad.
Y no estamos diciendo eso para que
piensen que somos mayores que ustedes. En verdad, somos parte de ustedes así
como todo el Universo es parte de Dios. No hay cómo individualizarnos de una
manera absolutamente completa, una vez que estamos en una misma sintonía que
todos ustedes del orbe azul nombrarían lindamente de Dios.
Y que en algunas culturas llaman de Elohim, como si fuese la Divinidad
Creadora. Consideramos bello el nombre que ustedes nos atribuyen, Elohim. Tal vez, este nombre traduzca
aquello que es nuestra intención realizar, expandir la Creación. Ustedes
traducen de nosotros aquello que les es comprensible y aquello que consiguen
leer de nuestra esencia.
Si pudiésemos describir más de lo que
serían los Elohim o Elohins (no nos importa cómo colocan
ese nombre), lo substituiríamos por otro, más claro aún que ese, que sería “Alegría”. Nos gusta esta palabra, ella
significa mucho en su contexto físico. Ella abarca muchas cosas que ustedes
quieren tener y ser en la vida.
Los vemos con sus ambiciones y deseos y
vemos también qué es lo que está por detrás de ellos, y es justamente el mayor
de los deseos, el de sentir alegría. Ustedes ansían este estado y como no
pueden desear lo que no los compone, quieren eso contundentemente.
Porque ustedes son la esencia de lo que
llaman alegría y volvemos en nuestro asunto milenario sobre la Tierra: Ustedes
desean sentir quiénes son, pues solamente quienes ustedes son puede conferirles
el estado pleno de Bienestar. Y ustedes, así como nosotros, son Alegría, pura y
sólida.
Ustedes aman sentirse de esta forma y
buscan vivir cosas para sentirse en esa vibración porque cuando así se sienten,
están en interacción con su parte mayor. La Alegría les promueve el contacto
intrínseco con Dios, el Elohim en
ustedes.
Somos esencia puramente positiva porque
escogemos, voluntariamente, abrir mano de las viejas disculpas que aseguran el
bienestar del individuo, sea sobre la Tierra
o en cualquier otro lugar del Universo. Y les pedimos a ustedes que
desean vivir en ese estado donde todo es posible: Suelten los que los asegura
insistentemente. No, amigos terrenos, no hay nada impidiéndoles vuestro
progreso.
No existen fuerzas capaces de hacerlos
ir hacia atrás, eso no puede ocurrir. Hasta quien desea que ustedes vayan hacia
atrás prosigue andando hacia el frente, sin embargo, aún no tomó nota de eso. Todo sigue hacia el
frente, en el flujo constante y eterno del Universo.
Entonces, quieran permitir eso. El poder
que los creó y orquestó vuestra vida
física , vuestra venida espectacular al orbe terrestre, se encargó de adicionar
en sus paquetes de creación, todo aquello que les provoca el sentimiento que
sustituiría el nombre Elohim, o sea, la Alegría.
La Alegría, siendo composición de
vuestra esencia, los sigue naturalmente. Y ustedes precisan permitir. Por más
divinos que todos sean, vuestra divinidad no les impide de hacer vuestras
elecciones personales, ella tan sólo los llama y por eso, decimos con Alegría:
Todas las cosas buenas que desean están una simple decisión de cada uno, la
cual es la siguiente:
Me voy a sentir alegre y no me importará el viento que aparentemente sopla
contra mí, no daré atención a las tempestades que creo que caen sobre mí, no
daré importancia a las cosas que insistentemente, a mi modo de ver, niegan
aquello que soy y contradicen aquello que deseo vivir.
Y no quiero vivir en un mundo donde reina el odio, no. Ese mundo no va a
existir más para mí. Porque para sentirme genuinamente alegre y feliz, preciso
tener conciencia de que el odio es tan solo una elección hecha a partir del
dolor, por un individuo que desea aliviarse de lo que siente, entonces, él
encuentra en el odio una manera de expresar eso. Yo lo respeto, pero elijo un
camino diferente, creyendo que el odio no es un sentimiento o una energía predominantemente
mala, él es tan sólo una elección mal hecha a partir de un estado de
desconexión de quiénes somos , y somos la Alegría.
Yo opto hoy por conectarme con el Elohim de mi interior, la Alegría. Elijo,
independientemente de cualquier componente físico de mi realidad física,
sentirme mejor. Eso está sobre mi poder así como lo están todas las cosas
cuando estoy viviendo en lo mejor de mí.
Lo mejor de mí es estar bien y estar Bien y ser feliz en la esencia y en la
verdad de quien Yo Soy. Eso todo siempre estuvo accesible para mí, tan sólo me
olvidé. Y hoy, escojo recordarme y afirmarme en esa Verdad del Bien que es la única que realmente me compone.
Los apreciamos en Amor.
Haya Luz!
A través de Vinícius
Francis
Traducción al español – Shanti
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