Las rosas tienen espinas, lo sé, pero no las busco con los ojos para observar sus espinas, sino sus pétalos. La espina es tan solo el contraste que me ayuda a identificar lo que quiero ver en la rosa.
Y claro, notando que la espina existe, ella me ayuda a sostener la rosa sin lastimarme.
Así es como la vida, el contraste existe para ayudarme a ejercer el don de la vida, sabiendo dónde me puedo sostener, sin lastimarme. Adonde puedo ir, en lo que puedo pensar, lo que puedo sentir sin herirme.
ELOHIM
A través de Vinícius Francis
Traducción - La Conciencia Elohim